Description
Esta magnífica propiedad es un emblazonado pazo gallego ubicado en la provincia de Lugo, a poca distancia de la Mariña Lucense y de la impresionante Asturias occidental. Al inicio de este siglo, los propietarios actuales, empresarios originarios de la zona pero residiendo fuera de España, adquirieron la propiedad con el propósito de rehabilitarla y explotarla como un complejo turístico, que incluiría un hotel, restaurante y apartamentos. La rehabilitación integral se llevó a cabo en su totalidad, aunque el negocio nunca se abrió al público, utilizándose únicamente para eventos sociales ocasionales por encargo. Actualmente, los propietarios mantienen su negocio hotelero en el extranjero y, debido a su edad, no tienen intención de embarcarse en un nuevo proyecto empresarial, lo que les ha llevado a decidir ponerlo a la venta. La propiedad, como se mencionó, está completamente acondicionada y equipada para su actividad, excepto que la cocina no está instalada (en cuanto a cocinas, extractores, cámaras, etc.). Por lo demás, las otras 8 habitaciones están totalmente equipadas, al igual que el restaurante. Hay 3 salones en la planta baja y 2 más en la planta superior. Uno de ellos cuenta con una hermosa galería acristalada de madera y el otro está construido en torno a una enorme e impresionante lareira, también restaurada. Las paredes interiores están hechas de piedra vista en los salones, así como en varias de las habitaciones. En términos arquitectónicos, el edificio principal está construido en mampostería de piedra y pizarra, con unos 800 m2 de espacio utilizable (hablando solo del edificio principal). Fue edificado alrededor de 1580 y cuenta con tres torres, dos de ellas octogonales, y una impresionante fachada. En los terrenos de la propiedad, también se encuentra una capilla de mediados del siglo XVIII con un retablo de una época desconocida, un hórreo, un palomar (también octogonal), un proyecto de vivienda y una nave. La superficie total de la finca supera las 3 hectáreas y un pequeño río la atraviesa, encauzado en piedra, que no se seca en ningún momento del año. Según el propietario, había compuertas en el río que se utilizaban en verano para elevar el nivel del agua y hacerlo navegable para actividades recreativas. En cuanto al entorno, es muy agradable: está bien comunicado, es accesible y está rodeado por la naturaleza. En cuanto a su precio de 2,100,000, hay que considerar que esta es una propiedad única que combina historia, riqueza arquitectónica y un potencial considerable para el turismo. La inversión no solo representa la compra de un edificio, sino también la oportunidad de desarrollar un proyecto que podría captar el interés tanto de locales como de visitantes internacionales, aprovechando su encanto y ubicación privilegiada. Sin duda, una oferta excepcional en el mercado inmobiliario actual.